He estado leyendo un libro de viajes de Cees Nooteboom, y ahora que leo su nombre, pareciera que las vocales que lo componen se prolongaran como un eco escurridizo, que finalmente se pierde en una nube de polvo. Un fragmento: " Lo que en cualquier otro lugar era un sistema bipartidista, aquí era una lucha con veneno, mentiras, perjurios, difamaciones, escándalos. Los periódicos se tenían cogidos del cuello los unos a los otros, los jueces eran parte, el dinero fluía por cloacas subterráneas y, al mismo tiempo, todo era un teatro, ópera bufa: directores de periódico filmados con ropa interior femenina, el Estado como secuestrador fallido, ministros que eran juzgados pero que nunca acabarían en la cárcel. Era el gran guiñol, algo que siempre había formado parte del país, una adicción de la que uno sólo podía liberarse con dificultad, mientras que todo el mundo ya estaba harto. Los problemas reales se encontraban en otro lugar, en un pequeño grupo de enconados asesinos que dominaban
Desde el 2006 abrí este blog. Lo he dejado y he vuelto, es como un familiar querido, existía antes de mis hijos. Escribiré reseñas de libros aquí porque con el tiempo me he dado cuenta del poder sanatorio y pacificador de los libros en mi vida. Si puedo ayudar a otros a recomendar lecturas, podré decir que algo ha valido la pena del esfuerzo de escribir y colgar cosas.